La platería genovesa, abundante ya desde el siglo XII, como material precioso y "reciclable", ha sufrido innumerables saqueos a lo largo de los siglos (piratas, guerras, por no hablar del buen Napoleón). Este es el motivo de la rareza de este espléndido par de pequeños espejos. En lámina de plata repujada y cincelada presenta los motivos típicos del barroco, volutas contrapuestas y hojas de acanto, en el centro una teca ovalada contiene el pequeño espejo antiguo. El par de espejos se encuentra en excelentes condiciones gracias al alto grosor de la lámina utilizada, que ha impedido abolladuras y roturas; ambos llevan el punzón de la "torre", la fecha (1)760 y las marcas de ensayo. Dimensiones: altura 24,5 cm, anchura 20 cm aproximadamente, peso 353 / 346 g